Hoy se conmemora el Día Internacional para la abolición de la exclavitud, un día que pone su foco de atención en la erradicación de las formas contemporáneas de esclavitud: trata de personas, explotación sexual, trabajo
infantil, matrimonio forzado y el reclutamiento forzoso de niños para
utilizarlos en conflictos armados. 21 millones de personas siguen viviendo en situación de esclavitud en el mundo, casi un siglo después de su abolición, esto es inaceptable.
Según datos de la Oficina de Naciones Unidas contra la droga y el delito en Europa, unas 140.000 mujeres se encuentran atrapadas en una
situación de violencia y degradación por motivos de explotación sexual, y
una de cada siete trabajadoras sexuales han sido esclavizadas en la
prostitución a consecuencia de la trata de personas. Las niñas y niños desgraciadamente también son exclavizados, en concreto una de cada cinco niñas y niños son víctimas de la trata para mendicidad forzosa, pornografía infantil o
explotación sexual y por supuesto para explotarlos laboralmente y usarlos como soldados en zonas con conflictos armados.
Datos, datos y datos, pero ¿qué podemos hacer para contribuir a erradicar esta lacra? la lucha contra la trata de personas es responsabilidad de todos los estados, autoridades y población, la ciudadanía debe estar alerta de esta realidad y denunciarla cuando la vea.
Yo he firmado para apoyar la campaña 50 for Freedom que pretende ayudar a millones de mujeres, niñas y niños y hombres a recuperar su libertad y su dignidad. Esta campaña es de la Organización Internacional del Trabajo y tiene como principal objetivo convencer al menos a 50 países a ratificar el Protocolo sobre trabajo forzoso para 2018.